
Durante julio la misma iniciativa se había repetido en otros territorios. Hasta la fecha se ha entregado e inaugurado más del 80% de los 2.200 dispositivos, correspondientes al proyecto “Nuestro Barrio Protegido”, que se ejecuta este año 2019. Solo restan los sectores de Los Almendros, «19 de Febrero» en La Palma y Ruta Norte, por lo que se estima que -sumados a proyectos anteriores- cerca de 7 mil dispositivos estarían funcionando este año, cubriendo un 25% de los hogares de la ciudad.
Las alarmas comunitarias constituyen un sistema solidario de participación ciudadana, para prevenir actos delictuales que afectan a las personas y sus bienes. Por ello, para su buen funcionamiento, es fundamental cómo la comunidad se organiza y prepara frente al delito. El proyecto fue presentado por la Dirección de Seguridad Pública y Familias, y en esta etapa tuvo una inversión de 40 millones de pesos, correspondientes a recursos municipales y de la Subsecretaria de Prevención del Delito, dependiente del Ministerio del Interior.
Al respecto, el alcalde Luis Mella afirmó que la instalación de los dispositivos en los establecimientos comerciales “responde al constante contacto y conversación que mantenemos con la Cámara de Comercio. Dispusimos de una cantidad para instalar en el centro, en el comercio local. Estas alarmas inicialmente eran comunitarias para poblaciones, pero nos pareció muy importante mostrar un signo de apoyo al comercio local al ofrecer para instalarlas acá en los locales comerciales”.
Sobre el balance que han realizado las autoridades del funcionamiento de estos dispositivos, el Alcalde afirmó que “nos han dado muy buenos resultados. Quiero contarles que se ha logrado evitar delitos en muchas poblaciones al hacer sonar la alarma, hay ladrones que se han escapado y arrancado, y que no han alcanzado a robar gracias a las alarmas. Quiero destacar lo que significa la cohesión social, en la unidad de los vecinos, cuando en torno a un proyecto como este, que se basa en la solidaridad, se unen para luchar contra la delincuencia”.
Asimismo, la directora de Seguridad Pública y Familias, Sandra Morales, añadió que “las alarmas tienen un sentido de mayor sensación de seguridad. El hecho de que cuentes con una alarma con un dispositivo que tú lo puedes accionar en cualquier momento, entonces eso te da mayor seguridad. Y en el caso del comercio, efectivamente para ellos hacer sonar una chicharra obviamente es mucho más importante. Si ven a alguien robando en su local y pueden hacer sonar la alarma, es absolutamente disuasivo en términos del delito, pero además en términos de sensación o de percepción de temor, a ellos les ayuda, les da mayor seguridad”.
Por su parte, el presidente de la Cámara de Comercio, Ricardo Ortiz, destacó que “es una señal potente de que estamos trabajando en conjunto, con las policías, los comerciantes y los usuarios. Queremos tener un centro seguro, por lo que este control (alarmas) que se ha entregado en 150 locales del sector comercial, nos permitirá advertir de la presencia de los indeseables y que la gente disfrute y pueda venir al centro con la mayor seguridad posible”.
En tanto, el coordinador regional de Seguridad Pública, Leonardo Olmos, valoró el trabajo realizado por la Municipalidad de Quillota y el compromiso de los vecinos, señalando que “Quillota es una de las comunas que ha implementado más alarmas comunitarias en sus barrios, abarcando un 20% o 30% de la ciudad, lo que refleja el buen trabajo, la preocupación y ocupación del Alcalde y el municipio en los temas de seguridad”.
En la misma línea, la Directora de Seguridad Pública y Familias, Sandra Morales, añadió que Carabineros está más presente en las calles, realizando rondas preventivas y formaciones en distintos territorios, como Plazuela «Pedro Aguirre Cerda», Plazas de Armas y de Los Ceibos o Villa Alegre. Esto significa que “se ha tratado de hacer mayor visibilización policial en aquellos sectores o territorios que presentan una tasa mayor de denuncias. Lo importante es que las personas denuncien cualquier tipo de delito al que se vean expuestos”, explicó la directora.
En la ceremonia, el coordinador regional de Seguridad Pública, Leonardo Olmos, anunció que la comuna se adjudicó cuatro modernas cámaras de vigilancia con reconocimiento facial, gracias al programa gubernamental “Plan Calle Segura”. Estos dispositivos se instalarían en lugares estratégicos, “que con Carabineros y la PDI hemos detectado como puntos conflictivos y peligrosos, que requieren de mayor vigilancia con cámaras”, indicó el Alcalde Mella.
Uno de los puntos sería calle Merced esquina Freire y otro, en el Parque Aconcagua. Además, la Dirección de Seguridad Pública y Familias prepara un nuevo proyecto que considera otras siete cámaras de vigilancia.